Sobre opiáceos, té, amor y otras drogas.

domingo, 1 de mayo de 2016

Estoy temblando. 
Quizá se deba
al poco azúcar en sangre. 
Quizá se deba
a una emoción
tan fuerte 
como ensordecedora. 
Quizá 
sea
solo
el 
viento
en una tarde
tranquila
y oscura,
en medio
de la vida misma. 
Me gustaría decir
una, 
dos cosas. 
Me gustaría no ser 
un alma errante.
Me gustaría 
incendiar el recuerdo,
así podría apagarlo
con las lágrimas
más dulces.

Mistress Loveless.